Fueron las
palabras de Roberto Vera, profesor de la escuela de Boxeo de Fernández. Además,
Vera manifestó que sus alumnos son muy
disciplinados y anhela que la escuela de
boxeo se propague por todo el Dpto. Robles.
Roberto Vera
Arencibia nació en Cuba, en la ciudad de Pinar del Rio, se graduó como
Licenciado en Cultura Física, Deportes y Recreación, pero hace algún tiempo
atrás se nacionalizó argentino. Hace 21 años que reside en la Capital del Agro
y es el fundador de la Escuela de Boxeo de Fernández. Más Deportes tuvo un mano
a mano en su domicilio y nos contó cómo fue su vida en el boxeo y el porqué de
poner una escuela en la ciudad.
Más Deportes: ¿Roberto Vera fue
boxeador?
Roberto Vera: “Yo practiqué mucho el boxeo, no de
competencia sino como deporte, tambien soy investigador y tengo muchos libros
escritos. En uno de mis libros escribí acerca del entrenamiento del cerebro y
el corazón. Existen muchos casos de muerte súbita en el deporte, una de mis
posturas es que no se lo entrena al deportista correctamente desde temprana
edad. El entrenamiento deportivo tiene dos direcciones, el primero es el
entrenamiento cerebro y el segundo es el entrenamiento corazón”.
Y añadió: “En
cuanto al entrenamiento del cerebro, el entrenador se ocupa de la técnica, la
táctica, la teoría y la preparación psicológica. El boxeo por ejemplo, sería un
deporte que prevalece más lo anaeróbico, un ejemplo es el “Chino” Maidana, que
a mi criterio es uno de los mejores boxeadores que tuvo Argentina y no desde el
punto de vista técnico, pero si desde el punto de vista corazón, Maidana para
su estatura tiene un corazón súper, él podía aguantar un combate de muchos
asaltos a tope, a un nivel máximo porque si lo agredías se volvía una fiera,
hay boxeadores que te atacan constantemente y si tú no estás preparado para
resistirlo tienes muchas chances de perder, porque si no estás preparado para
aguantarlo cuando te ataca, te llega la fatiga y comienzas a bajar las manos y
cuando bajás las manos vas al piso”.
“Yo practiqué
boxeo, como deporte como unos 15 años, después tuve que apartarme de las prácticas
porque me enfermé y tuve que hacer grandes esfuerzos para sobrepasar la
enfermedad, pero lo he logrado, me quedaron algunas secuelas, pero puedo
caminar, puedo hablar y eso es lo importante”.
“Yo nací en
Cuba, pero ahora ya soy un argentino más porque ya tengo la nacionalidad
argentina, pero todavía al lenguaje cubano lo tengo muy arraigado, cuando hablo
con mis alumnos, los más chicos, trato de hablar con un lenguaje argentino para
que me puedan entender y cuando hablo con personas más grandes, hablo normal
con acento cubano”.
MD: ¿Cómo llega a Fernández?
RV: “A Fernandez vine hace 21 años, estuve un año
completo atendiendo al señor “Grego” López en su rehabilitación cuando estuvo
con un problema de salud, después me fui a Córdoba a trabajar en una clínica
que se llama Vida Sana, después de eso fui a México, Puerto Rico, Estados Unidos
y regresé a Argentina. Cuando estábamos acá, con mi mujer nos pusimos de
acuerdo para vivir en un lugar tranquilo alejado de la Capital santiagueña, no
me gusta mucho el tráfico y aquí en Fernandez es mucho más tranquilo”.
“En
Fernandez hubo boxeadores, pero no había una escuela dedicada a enseñar a esos
atletas, nuestra idea es que la escuela de boxeo pueda permanecer por mucho
tiempo, yo tengo 72 años y me ayuda mi hijo y si mi hijo algún día deja de
entrenar boxeo porque él está estudiando y a lo mejor cambia de actividad hay
muchos alumnos que pueden trabajar en la escuela”.
“El objetivo
de esta escuela es que el boxeo se propague por todos lados, que llegue a La
Colonia El Simbolar, Forres, Beltrán, Taboada, Garza, Suncho Corral y por otras
ciudades más que están cercana a Fernandez.
MD: ¿La escuela tiene ayuda de otras
entidades o es todo a pulmón?
RV: “Esta escuela tiene la ayuda de muchas personas de
aquí de Fernandez, de amistades que me han ayudado y tambien he tenido ayuda de
la municipalidad de Fernandez. La escuela tambien ayuda a los alumnos con
algunas cosas, por ejemplo hace poco se hizo la compra de 18 guantines y eso se
les facilita a los alumnos para que puedan entrenar o tambien los alumnos traen
sus propios guantes eso queda a criterio de cada alumno”.
MD: ¿Cuál es tu sueño en el boxeo?
RV: “Un sueño que tengo es que los alumnos puedan
entrenar mañana, tarde y noche, me gustaría mucho que los chicos de bajo
recursos vengan y coman una merienda de un sándwich de jamón y queso con un
vaso de leche, quizás algún día pueda lograrlo, porque soy consciente que hay
muchos chicos que vienen a boxear y no están bien alimentados. Mis alumnos son
chicos muy disciplinados, ellos saben muy bien que el boxeo no es un deporte de
agresión. Ellos saben que en el boxeo se tienen que respetar, en esta escuela
no se obliga a nadie a competir, aquí se viene a aprender boxeo, a entrenar y
si el alumno tiene el deseo de llegar a competir lo pasamos a una selección y
el trabajo con ese alumno es más especial lo hacemos conocer más sobre las
reglas y el arbitraje”. Terminó diciendo el profesor Roberto Vera.
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